El fin de semana

Me dijeron que ya tenía tiempo sin escribir y tienes razón Edgar, he andado con mil cosas en la cabeza y ocupado con el trabajo que se me ha pasado encontrar tiempo para escribir acá lo último que he vivido.

Uf, la primera parte del año ha estado movida, como saben (o no) cambié mi residencia a otro estado del país para iniciar con un objetivo que tengo desde hace algunos años, vivir en un lugar con mejor nivel de vida y abrir mercado para lo que hago. Estuvo bastante bueno y aprendí muchas cosas en estos meses, sobre mi trabajo, sobre las personas a quienes quiero, sobre personas nuevas, pero sobre todo sobre mí.

Algo que me ha estado molestando en todo el año son algunas personas que son justo como el personaje de Alan de Two & Half Men, ese que nunca tiene dinero, vive con el hermano y cuando no tiene plata se tira al piso para que lo recoja la gente. ¡Fuuuta!

En realidad no me importan, por mi pueden arrastrarse lo que quieran, pero me revienta que por culpa de gente así a mi me perjudiquen indirectamente, porque tengo que estar justificándome por no sentir lástima por ellos, por señalar lo egoísta e inmaduro que es que alguien más pague tus cuentas luego que por voluntad propia se metió en el lodo.

Ahora, en el mes ocho y a punto de iniciar el mes patrio, me encuentro en un momento que podría ser una inflexión de mi vida hasta ahora, existe una oportunidad de la cual hoy tendré más información para poder anunciar formalmente la noticia, de momento no puedo hacerlo porque porai recuerdo un dicho que dice “Del plato a la boca, se cae la sopa” y como no me gustaría que eso suceda pues no digo nada jaa. Aunque, en realidad estoy seguro que tendré un resultado positivo y ya lo siento mío; los astros lo indican jajajaja.

Cambié de coche este mes, apenas. Estuve dos o tres semanas sin auto luego de vender el anterior, creo que por acá ya lo había puesto. Con el nuevo, puaf, tuve muy mala suerte las primeras tres semanas porque primero me mordió un tránsito por el permiso de circulación (sí lo traía pero son especialistas en encontrar algo mal cuando llevas todo bien), luego que el engomado por no traerlo en la ventana donde debe ir, luego se llevan mi coche por estar estacionado en lugar prohibido (prohibido para mí porque aparentemente los demás conductores tienen derecho total) y finalmente gracias a que los tránsitos tan eficientes en su trabajo, permitieron que un camión con desperdicios industriales circulara con la carga abierta (raro en México), lo que ocasionó que tirara un algo que me rompió rin y llanta. Afortunadamente con mi audacia y sagacidad logré hacerme ya del repuesto a una fracción de lo que cuesta en la agencia.

Baidegüey ¿Qué onda con los coches que traen una placa amarilla con tipografía negra que dice “Vehículo al servicio del partido” y trae un sol? ¿De qué beneficios gozan esos güeyes? ¿Solo por ser perredistas ya se supone que no deban registrar sus autos y pasarse las reglas de tránsito por alto? Me enferman estos tipos.

Como es evidente que tiene tiempo que no escribo posiblemente encuentren cosas que no conectan con lo recién leído, no importa en realidad, mi mente y mis ideas rara vez son lineales, salto de un lado hacia otro según conecto pensamientos.
Este fin de semana estuvo increíble, compartí con mis muy queridas amigas de la carrera, aunque me hizo falta mi hermanita y la extrañamos pero seguro nos veremos juntos otra vez. Hoy tuve un desayuno increíble y pasé la mañana junto con otra amiga de la asociación de estudiantes.

Estoy en un proceso en el que estoy desarrollando habilidades, me siento muy contento porque siento que puedo hacer lo que mejor sé hacer, que enseñar a las personas y desarrollarlas. Estoy feliz, sin duda es una etapa de aprendizaje y también de retos, de salir de mi zona de confort.

No recuerdo si les había dicho que cambié de auto, tengo un Mazda 3 y he tenido una cantidad de calamidades en los dos primeros meses con él que me dan el ataque y extraño el Megane. Lo que más extraño es el suave y dulce empuje del motor, uuf, nada se le compara a la potencia de más de 200 hp . Pero bueno, tengo el auto que puedo pagar en este momento que definitivamente no es el que quiero, y también se que 3 años se pasan rápido así que es nada lo que falta para entonces sí comprarme el auto que quiero.

Siento que tengo tantas cosas por hacer, le pido a Dios que me de la vida para poder hacerlas. ¿De qué trata? Sencillo, servir a los demás.

¿Saben? Sigo un blog de moneros de crítica política y aunque me gustan las observaciones que hacen, a veces siento que se clavan en tirarle con todo a lo que haga el gobierno, que si previno porque previno, que si no previno porque no previno. Y ahora que estoy haciendo algunas lecturas me doy cuenta que aunque tienen razón en muchas cosas, otras las ven tan mal porque están utilizando un cristal terriblemente malo donde están constantemente encontrando los negritos en el arroz de todo.

Ellos también tienen una responsabilidad, no solo de ver la paja en el ojo ajeno sino también de enviar mensajes que motiven a quienes no tienen la información suficiente para motivar cambios positivos en la vida de cada persona, me parecen en verdad irresponsables algunos de sus críticas. Todos tenemos que participar positivamente en el mejoramiento de nuestra familia, nuestra comunidad, nuestro país y eventualmente nuestro mundo.

¿Es que la gente, tú, ya perdiste la confianza en ti para tomar decisiones que cambien de forma positiva tu vida y la de los demás? Solo no puedo, necesito de ti para que me des la mano cuando me canse porque yo haré eso mismo cada vez que sea necesario.

Ok es todo por hoy, hasta pronto.